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En un hecho sin precedentes, un privado logró exportar energía

17.10.2017

En un hecho sin precedentes, un privado logró exportar energía

En la madrugada de este lunes y por primera vez en la historia, una empresa privada comenzó a comercializar energía eléctrica fuera del territorio nacional. Se trata de la compañía Ventus que venderá energía de fuente eólica a Argentina, mediante un contrato firmado con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico de ese país (Cammesa).

Esta semana Ventus tiene previsto enviar 3.600 MW/h (megaWatt/hora), según se informó desde la empresa a El Observador. Cada semana la compañía ofrece un paquete de energía cuyo volumen se estima en función de las previsiones de generación de sus parques. En función de los precios propuestos y sus necesidades Cammesa decide si acepta o no realizar la adquisición. Para exportar, la empresa debe pagar US$ 3 por MWh a UTE por el uso de sus redes de transmisión.

Ventus opera actualmente 72,9 MW de potencia eólica ubicados en seis departamentos (Rocha, San José, Canelones, Durazno, Colonia y Florida) que generan 250.000 MWh por año. Se trata de pequeños parques que son propiedad de 34 empresas industriales ajenas al rubro de la energía, y que engloban una inversión aproximada de US$ 150 millones. 

El acuerdo de exportación autorizado por decreto de la Dirección Nacional de Energía incluye a los parques eólicos 18 de julio (10 MW), María Luz (10 MW), Libertad (7,750 MW), Villa Rodríguez (10 MW), Solís de Mataojo (10 MW), Julieta (3,6 MW), Rosario (9 MW) y Egraw 3.6 MW). 

Estos emprendimientos operan en el mercado spot y pueden vender la energía a un privado en Uruguay, en el exterior, o a UTE en caso que el ente lo necesite. Esto porque no cuentan con contratos de venta firme con la energética estatal y, por ende, tampoco tienen precios prefijados ni seguridad de compra de energía.

El valor del spot surge del agua o el térmico más caro despachado por UTE. Con años de lluvias, el ingreso de parques eólicos privados con contrato, y los propios proyectos de UTE, cada vez es menos usual encender una central térmica para atender el suministro de la demanda local, salvo las horas de pico de consumo, algo que juega en contra de los operadores spot.

En ese contexto, la perspectiva de ingresos comercializando al mercado spot es bastante limitada y es por ello que la apertura de nuevos mercados resulta clave para poder colocar su producción a precios que sean rentables.

"Estamos muy satisfechos de poder concretar por primera vez una venta de energía fuera del país. Este es un hito y un salto importante para nuestra industria de energías renovables. Para el país que está impulsando una fuerte apuesta en este ámbito y para nuestra empresa, que con gran esfuerzo ha logrado este hito", declaró a El Observador el director de Ventus, Francis Raquet.

El convenio con Cammesa fue firmado en setiembre pasado. El mismo mes la Secretaría de Energía argentina aprobó la importación, que se realiza en la modalidad spot, de acuerdo a los procedimientos del Mercado Eléctrico Mayorista de Argentina y respetando las prescripciones del Convenio de Interconexión entre ambos países. Este convenio es interrumpible para casos en que el sistema eléctrico uruguayo tenga riesgo de déficit y sea necesario volcar la energía a la red local.

Brasil importa bastante más pero aún no pagó

Los números de UTE muestran que en lo que va de 2017 las ventas de energía a la vecina orilla vienen 33% por debajo de 2016, pero eso se ha visto compensado por la demanda del mercado brasileño. En mayo de este año se comenzaron a vender excedentes utilizando la estación conversora de Melo-Candiota, que permite un trasiego por una potencia de hasta 500 MW. A la fecha se llevan colocados unos 563.290 MW/, una cantidad 25 veces mayor a la registrada en igual período de 2016. Si se toma un precio promedio de US$ 79 por MWh la facturación a ese destino ya ronda los US$ 45 millones. Días atrás, al ser consultado por el tema, el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla dijo a El Observador que se realizan gestiones ante la estatal Electrobras para que Brasil se ponga al día con el pago de la energía. El jerarca indicó en la oportunidad que las demoras se deben a aspectos burocráticos.

El Observador